Un tanatorio es un edificio destinado a realizar todos los servicios funerarios necesarios después del fallecimiento de una persona, como la preparación del cuerpo del difunto, la celebración del funeral, las salas de velatorio o los servicios de inhumación o incineración.
¿Qué es un tanatorio?
Un tanatorio es un tipo específico de establecimiento destinado a la realización de servicios funerarios y velatorios. Es un lugar donde las familias pueden reunirse para honrar y despedirse de sus seres queridos fallecidos, así como para llevar a cabo ceremonias religiosas, conmemorativas y de despedida.
En términos generales, un tanatorio es similar a una casa funeraria, pero en muchos países de habla hispana, el término “tanatorio” se utiliza de manera más específica para referirse a este tipo de establecimiento. Además, los tanatorios suelen ofrecer una variedad de servicios relacionados con el funeral, incluyendo salas de velatorio, salas de ceremonias, áreas de preparación del difunto y oficinas administrativas, entre otras.
Asimismo, los tanatorios pueden estar equipados con comodidades y facilidades para los visitantes, como áreas de recepción, salas de estar, cafeterías o áreas de descanso. También pueden contar con tecnología moderna, como sistemas de sonido, proyectores de vídeo o pantallas para la presentación de fotos o vídeos conmemorativos.
¿Qué servicios ofrece un tanatorio?
El tanatorio es un lugar que tiene el objetivo de organizar todo lo relacionado con el funeral y entierro o cremación del difunto para que sus seres queridos más cercanos se puedan centrar en el proceso de duelo. Por ello, estos son los servicios fundamentales que ofrece un tanatorio:
- Salas de velatorio: se proporcionan espacios donde los familiares y amigos pueden reunirse para velar al difunto, ofrecer sus condolencias y compartir recuerdos. Estas salas suelen estar equipadas con sillones, muebles agradables y un ambiente respetuoso y tranquilo.
- Salas de ceremonias: el tanatorio suele contar con una capilla o sala multiconfesional donde se pueden llevar a cabo servicios religiosos, conmemorativos o de despedida en honor al difunto. Estas salas suelen estar equipadas con un altar, bancos y equipos de sonido.
- Preparación del difunto: como el embalsamamiento, el aseo y el arreglo estético para la presentación durante los velatorios y ceremonias.
- Gestión de trámites y documentación: el personal del tanatorio puede ayudar a las familias con los trámites legales y administrativos relacionados con el fallecimiento, como la obtención de certificados de defunción y la inscripción en el Registro Civil.
- Servicios de cremación o entierro: también puede ofrecer servicios de cremación o entierro, incluyendo la coordinación de la disposición final de los restos y la organización de servicios conmemorativos asociados.
- Asesoramiento y apoyo: a las familias en la planificación de los arreglos funerarios, la selección de productos y servicios funerarios y la atención durante el proceso de duelo.
- Facilidades adicionales: como áreas de recepción, cafeterías o áreas de descanso para los visitantes, zona de aparcamiento o atención psicológica que ayude a los familiares a enfrentarse al duelo.