La incineración es el proceso por el que los restos de un difunto se reducen a cenizas en el crematorio para posteriormente entregárselas a su familia.
¿Qué es la incineración?
En términos funerarios, la incineración se refiere al proceso de cremación de los restos mortales de una persona fallecida. Durante este proceso, el cuerpo se coloca en un horno crematorio especialmente diseñado, donde se somete a altas temperaturas, generalmente entre 760°C y 1150°C, durante un período de tiempo que puede variar dependiendo de varios factores, como el tamaño del cuerpo y el equipo utilizado.
La incineración funeraria es una alternativa a la inhumación tradicional, donde el cuerpo se entierra en el suelo. Después de la incineración, los restos cremados, que consisten principalmente en cenizas y fragmentos óseos reducidos a polvo, se recogen y se colocan en una urna funeraria. Estas cenizas pueden ser enterradas en un cementerio, colocadas en un nicho, esparcidas en la naturaleza o conservadas por los seres queridos del difunto según sus deseos y creencias culturales o religiosas.
Además, la incineración funeraria ha ganado popularidad en muchas partes del mundo debido a razones como la flexibilidad en la planificación de funerales, el menor impacto ambiental en comparación con la inhumación tradicional y la preferencia personal o cultural. Sin embargo, esta práctica funeraria puede variar mucho según la región y las costumbres culturales.
¿Dónde se realiza la incineración?
La incineración de un difunto generalmente se lleva a cabo en un crematorio, que es una instalación diseñada específicamente para este propósito. Además, los crematorios suelen ser lugares discretos y tranquilos, equipados con hornos crematorios, salas de velatorio y áreas para que los familiares y amigos puedan reunirse antes o después del proceso de incineración.
Asimismo, los crematorios pueden ser gestionados por el ayuntamiento, empresas privadas o entidades religiosas. En algunos casos, los crematorios pueden estar asociados con cementerios, lo que permite a las personas elegir entre la inhumación tradicional o la cremación para sus seres queridos.
Ventajas de la incineración
Entre las ventajas de la incineración se encuentran las siguientes:
- Eficiencia espacial: reduce el espacio requerido para la disposición final de los restos mortales, en comparación con la inhumación tradicional.
- Flexibilidad en la ubicación: las cenizas cremadas pueden ser conservadas, enterradas o esparcidas en diversos lugares, ofreciendo opciones geográficas más amplias para la conmemoración.
- Menor impacto ambiental: puede tener un menor impacto ambiental en términos de uso de recursos naturales y contaminación del suelo en comparación con la inhumación.
- Proceso rápido: generalmente se completa en un período de tiempo más corto que la inhumación, lo que permite una planificación más flexible de los servicios funerarios.
- Personalización: en la forma en que se manejan los restos cremados, lo que puede satisfacer las preferencias del difunto y su familia.
¿Cuánto cuesta la incineración?
La incineración es una forma de despedirse de los seres queridos cada vez más popular, entre otras cosas, porque es ligeramente más económico que el entierro. De media, las incineraciones en España cuestan de media 3 600 euros, por lo que el 40 % de las defunciones en España optan por este servicio.